Herencia Transgeneracional – ¿Cómo el pasado influye el futuro?
Cuando hablamos de herencia transgeneracional, estamos refiriéndonos a todo aquello que se transmite de generación a generación. Al analizar nuestro árbol genealógico, podemos contactar con todo lo dicho y lo no dicho.
El árbol de cada persona tiene una lógica, un hilo conector que nos muestra aquellos aspectos que tenemos que sanar, y que de no hacerlo, nos veremos destinados a seguir repitiendo historias pasadas y transmitiéndola a las generaciones futuras.
En cada uno de nosotros existe una red de memorias y el denominador común son los secretos que se esconden detrás de cada generación.
En el clan familiar se esconde aquello que el inconsciente biológico guarda, pero que aparece en forma de síntomas, enfermedades, eventos que se repiten, tipos de relaciones, adicciones, muertes violentas, etc., para que dichos conflictos se puedan resolver en generaciones posteriores.
Es así como, aún sin saber detalles, sin descubrir determinados secretos, ya que son situaciones excluidas de la consciencia familiar, podemos construir ciertas hipótesis y trabajar en base a ellas, para culminar con la resolución de lo que ha traído tanto sufrimiento y dramas en determinadas familias.
A través del estudio del transgeneracional podemos ver cómo podemos estar viviendo la vida de un antepasado que posiblemente no conocimos, o identificándonos con el que lo perdió todo, o con aquel a quien no se le reconoció el dolor por la pérdida de un hijo, o por ser rechazado por el amor de su vida, o aquel que vio sus sueños truncados por complacer los deseos de sus padres, etc.
Repetimos historias, incorporamos a nuestra vida y a la de los nuestros el programa de otros en situaciones dramáticas. Todos nos construimos psíquicamente alrededor de un drama.
A través del estudio de nuestro árbol genealógico podemos descargar la parte emocional dramática que nos sentencia. El solo hecho de trabajar con el árbol, es sanador. Vale la pena hacer el recorrido.